EL RETO
El mundo está experimentando un crecimiento urbano sin precedentes. Hoy en día, el 55% de la población mundial reside en áreas urbanas, y se espera que crezca hasta el 68% para 2050, y la mayor parte se producirá en Asia y África. También se espera que solo tres países representen el 35% de ese crecimiento: se proyecta que India agregará 416 millones de habitantes urbanos, China 255 millones y Nigeria 189 millones. La rápida urbanización desafía el desarrollo sostenible, especialmente en los países en desarrollo, donde los gobiernos locales a menudo no logran hacer frente al rápido crecimiento urbano y no pueden proporcionar servicios e infraestructura adecuados, lo que lleva a trampas de pobreza urbana y mayores desigualdades. Este rápido crecimiento urbano en todo el mundo ha llevado a un número creciente de habitantes de barrios marginales, aumento de la contaminación del aire, infraestructura y servicios básicos inadecuados y expansión urbana no planificada.

Dado que la gestión del crecimiento urbano es un elemento clave para el cumplimiento de los ODS, el estudio del crecimiento de la huella urbana se vuelve fundamental para informar mejor a los responsables políticos. Desafortunadamente, pocos estudios han utilizado métodos sistémicos y estandarizados para identificar la forma en que crecen las ciudades latinoamericanas. La comprensión del crecimiento de la huella urbana puede ayudar a maximizar los beneficios de la aglomeración al tiempo que se minimizan los impactos adversos del propio crecimiento urbano. Algunas de estas lecciones pueden ser útiles para África y Asia, ya que su desafío actual es construir asentamientos urbanos sostenibles para el futuro.

ÚLTIMOS DESARROLLOS
En colaboración con el Banco Mundial, hemos estudiado las últimas décadas de la dinámica espacio-temporal del crecimiento urbano en más de novecientas ciudades de América Latina y el Caribe (ALC) utilizando una combinación de imágenes satelitales nocturnas e información de mallas viales. Descubrimos que algunas ciudades de ALC experimentaron un crecimiento tipo expansión, mientras que otras ubicadas en terrenos accidentados crecieron en pendientes más pronunciadas, y el crecimiento urbano de algunas ciudades de Bolivia y Venezuela consumió grandes áreas protegidas.

Con el objetivo de predecir lo que sucederá en el futuro, hemos desarrollado modelos de crecimiento urbano que pueden pronosticar el proceso de urbanización y la distribución de personas en cualquier territorio del mundo utilizando datos de libre acceso. Probamos nuestro modelo en las ciudades de Rionegro y Valledupar.

Actualmente estamos trabajando en colaboración con investigadores de NYU Shanghai y la Universidad de Oxford para analizar las incertidumbres del crecimiento urbano espacio-temporal de Jiaxing y Lishui, dos pequeñas ciudades de China. En esta colaboración, queremos comparar las predicciones de nuestro marco con las de un modelo de crecimiento ampliamente utilizado en la literatura conocido como modelo SLEUTH CA. Al mismo tiempo, y en colaboración con investigadores del Banco Mundial, estamos desarrollando una metodología para conocer las futuras áreas metropolitanas de América Latina.

En términos de impacto, estamos aplicando nuestros modelos en el marco de un proyecto para las Empresas Públicas de Medellín (la empresa de servicios públicos más grande de Colombia). El objetivo es anticipar las demandas de acueducto y alcantarillado para que puedan evaluar su capacidad instalada, estimar cuándo se necesitará nueva infraestructura y planificar inversiones futuras.